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Portales de salud de comunidades autónomas: excelentes recursos pero poco accesibles

CCAA5-spain 

Nacho Basagoiti

  

 Ignacio Basagoiti (@jbasago). Médico.  Dedicado a la tecnología aplicada a la salud y la sanidad. Las personas son el centro de todo. Vive en Valencia.

 

Los indudables beneficios de la descentralización autonómica, en cuanto a los servicios de salud, se ven a veces ensombrecidos por la dispersión de recursos que produce.

Uno de los elementos clave de que dispone el ciudadano para valorar la calidad de la información en Internet es la fiabilidad de las fuentes. Que duda cabe que los servicios de salud son marcas reconocibles y confiables. Esta ventaja estratégica, que permite a éstos difundir la información online dirigida a la alfabetización en salud, prácticamente se diluye cuando dichos recursos son difíciles de encontrar en las propias páginas que los contienen. Ni que decir tiene que el posicionamiento de éstos en Google no ha sido vigilado ni cuidado, y esto tiene como consecuencia directa un uso y número de visitas muy reducido. Dicho en otras palabras: la información, contenida en los portales de salud de los gobiernos autónomos, es difícil de encontrar cuando el ciudadano la busca.

Esta situación es más dolorosa, si tenemos en cuenta que se han empleado importantes recursos en generar tanto la información online como las páginas que las contienen, y esta tarea se ha hecho, en general de manera excelente, consiguiendo recursos e información dirigida al ciudadano de alta calidad.

Es necesaria una actualización en las políticas de marketing y difusión de estas instituciones. El internauta accede a los contenidos prácticamente siempre a través de Google, cada una de las veces que quiere encontrar información sobre un tema. Una página bien estructurada (con un buen webmap) es imprescindible, pero hay que asumir que los visitantes accederán directamente a los recursos, y hay que prepararlos para ello.

Por último, otra de las cuestiones es la variedad de los temas de salud abordados. Al igual que ocurre con las campañas de Salud Pública, cada consejería de salud autonómica emplea recursos en generar documentos que ya existen en la red. Podemos encontramos así hasta con 19 documentos diferentes que tratan de explicar la misma cosa (pej: ¿Qué es la diabetes?, recomendaciones ante la ola de calor, alimentación saludable, etc, etc). Volvemos a conceptos antiguos: la propiedad de la información. Cada servicio de salud quiere sus propios documentos, porque quiere controlar su imagen de marca que puede transmitirse en ellos. Tampoco es habitual que unos servicios de salud enlacen o referencien documentos de otros, cuando esta sería una solución sencilla a la hora de brindar una información al ciudadano mas completa. Las ideas fuerza que deberían imponerse son enlazar, compartir, dinamizar. ¿Es un destino inevitable el emplear recursos en reinventar constantemente la rueda? Se está produciendo la inmersión de las organizaciones y los propios portales de salud en las redes sociales. Mantengo la confianza de que estas ideas fuerza terminarán por adoptarse.

Mientras tanto, existen plataformas que tratan de difundir e impulsar dichos recursos, tratando de ofrecer un mejor servicio a ciudadanos y profesionales: Salupedia, Cuidando, la propia fundación ISIS. . . Dedicaré una próxima entrada a hablar de ellos.

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