Últimas tendencias en salud digital

La salud digital está en constante evolución y es difícil entender hacia dónde va. Pero existen tres vectores de cambio que nos permiten conocer el camino que va a seguir en los próximos años. 

El cuidado se acerca al paciente

Hasta hace pocos años, los pacientes necesitaban desplazarse al hospital, al centro médico o a la farmacia presencialmente y no concebíamos otra manera de hacerlo. Sin embargo, cada vez más el cuidado se acerca al paciente, allí donde esté él. 

Para que este cambio sea posible, la salud se ha apoyado en la tecnología y en diferentes soluciones digitales. A continuación te hablamos de algunas de ellas.  

• Butterfly. Se trata de un aparato móvil que cabe en la mano que sirve para realizar ecografías. Se puede conectar a un iPad o un smartphone.  
• Peek. es una plataforma de software móvil diseñada para mejorar la atención oftalmológica en áreas remotas o de bajos recursos. Utiliza una cámara especialmente diseñada para capturar imágenes de alta calidad del fondo del ojo, lo que permite a los médicos diagnosticar y tratar enfermedade. 
• Mobile ODT. Esta solución está diseñada para hacer exámenes ginecológicos. Este tipo de tecnologías son especialmente útiles en países subdesarrollados, donde el médico se desplaza a visitar a los pacientes. Ayuda a reducir los tiempos de espera y los plazos para detectar enfermedades mortales como cáncer cervical o de útero, ya que en lugar de remitir a los pacientes al hospital, el médico puede realizar las pruebas durante las visitas in situ. 
• Teladoc. Es un servicio de vídeo-consulta móvil. Se utiliza en sitios descentralizados, como por ejemplo en  el hospital de Berga (Cataluña), ubicado en los Pirineos y a dos horas en coche de Barcelona. En este centro, carecen de servicio de pediatría y por ello han contratado esta solución, gracias a la que se conectan con médicos del hospital Sant Joan de Déu de Barcelona a través de cámaras integradas y tecnología super precisa. 

Por otro lado, las terapias digitales también están creciendo mucho.  Consiste en apps móviles o softwares que pueden completar o incluso reemplazar, un tratamiento tradicional o un fármaco. Están validadas clínicamente, que es lo que las diferencia de una app de salud normal. Se pueden usar 24/7 desde casa, por lo que permite tener acceso a más personas. Otra ventaja es que permite evitar los estigmas ya que ofrece más privacidad para los pacientes.

Además, estas soluciones permiten recolectar datos de forma continua y así personalizar el tratamiento de los pacientes que lo usan. Aunque no cuidan como tal a los pacientes, ayudan a lidiar con los síntomas desde casa. De hecho, pueden significar una solución a enfermedades que hoy en día no las tienen, como es el caso del colón irritable. Lo hacen utilizando técnicas cognitivas: un mix de educación, ejercicio y meditación o relajación. 

La telerehabilitación por su parte es muy útil para que los pacientes después de una operación, en lugar de ir al centro puedan hacer la rehabilitación en casa. Es el caso de ReHub, una empresa de Barcelona: el fisioterapeuta le prescribe un programa de rehabilitación que el paciente hace en casa. ¿Cómo? Se envía a casa del paciente un maletín con los sensores y/o aparatos para hacer los ejercicios. El fisioterapeuta puede ver en el ordenador si el paciente está haciendo los ejercicios, cómo los está realizando y también si está reaccionando al tratamiento lo que le permite  ir ajustándolo. También se incluye el feedback al paciente, para que pueda mejorar su forma de hacer los ejercicios. 

Uno de los campos donde vemos más aplicaciones de terapias digitales es en la salud mental, sobre todo desde la pandemia. 

• Big Health, es una de las empresas pioneras. Ofrece dos soluciones: una para insomnio y la otra para estrés.
• Aimedis ha desarrollado Avalon, la primera ciudad médica del Metaverso. Se puede entrar en esta ciudad con o sin gafas de realidad virtual. El usuario se ve en forma de avatar y dentro puede visitar el psicólogo o realizar terapias de relajación. Por ejemplo, el metatarso podría ser utilizado para enfrentar las fobias. 

Prevención

Este vector de cambio va desde la medicina curativa a la medicina preventiva. 

El primer ejemplo de ello es todo el campo de los OMICS. Son test que permiten obtener más información de los pacientes y así manejar mejor su salud y la prevención de enfermedades. El paciente puede comprar una caja por su cuenta y recibir los resultados en casa. Es el caso de Nebula, para genómica, y  Viome, para el microbiótica. El procedimiento es el siguiente: el paciente recibe la caja, se hace el test, lo devuelve, y le remiten los resultados y junto con consejos para mejorar la dieta. También pueden ir acompañados de complementos para aumentar la salud intestinal. 

Luego están los wearables que permiten medir las constantes vitales. Oura por ejemplo nos indica valores sobre el sueño y nos permite tomar acciones para mejorar el score y la salud en general. Fitbit, de Google, se enfoca más en la prevención: envía mensajes motivación sobre el impacto positivo que puede tener hacer mil pasos más al día en la salud de las personas y de los enfermos crónicos. 

Las aseguradoras están cada vez más interesados en la prevención. Animan a los clientes para que cuiden más de su salud y así conseguir que enfermen menos; y por tanto, reducir gastos. Vitality es una empresa de UK que le da a los clientes un Apple Watch y establecen en el momento del contrato unos objetivos: comer sano, ir al gimnasio, mejorar los valores, etc. Si lo hace, no tiene que pagar el Apple Watch, pero sí tendrá que pagarlo si no cumple con los objetivos. En Europa, estamos acostumbrados a que el sistema de salud lo pague todo por lo que es difícil concebir este tipo de soluciones. Es distinto en USA donde tienen ya la cultura de pagar por ellos mismos los servicios médicos y se preocupan por prevenir enfermedades. Por tanto, el tipo de cliente es distinto en función del tipo de app y de la cultura a la que va dirigida. 

La última rama sería el seguimiento y la detección precoz. Moovcare es una solución francesa abonada por la seguridad social dirigida a pacientes que han padecido cáncer de pulmón. El paciente inserta cada semana los síntomas en la plataforma, el algoritmo analiza los síntomas y si hay un problema, el sistema avisa inmediatamente al equipo médico para que puedan tomar decisiones cuanto antes. Los gemelos digitales son una solución en desarrollo utilizada para la detección precoz. Un gemelo digital es una versión digital de una persona que se obtiene con datos genómicos, datos del dossier del paciente, análisis, etc. La idea es hacer un seguimiento del gemelo digital a lo largo de nuestra vida y así poder identificar una enfermedad antes de que pase. También se podrian utilizar para escoger el mejor tratamiento para un paciente: el más eficiente y el que tenga menos efectos adversos. Los gemelos digitales permitirán que la historia clínica de cada persona sea analizable en su totalidad. 

Experiencia personalizada

Los pacientes tienen un rol cada vez más importante en su salud. Cada vez están más empoderados sobre las decisiones relacionadas con su salud. Así pues, las soluciones ponen el paciente cada vez más en el centro y con terapias más personalizadas. 

Un ejemplo es el apoyo emocional que se trata de dar a las personas. Vemos soluciones que ayudan a los pacientes a gestionar mejor el dolor y la ansiedad, sobretodo cuando van al hospital. Xploro es una solución creada para niños con cáncer. La hija del fundador padeció cáncer cuando era pequeña. En la aplicación se ve un avatar a través de realidad aumentada que acompaña al niño todos los días durante su estancia en el hospital. Si tiene que someterse a una resonancia magnética, el avatar le enseña el ruido que va a hacer para que el niño esté preparado. Además, se encuentra el equipo médico dentro de la app y el niño puede ponerle nombre a los médicos, cambiarles la ropa, etc. Así los pacientes están más relajados, y en consecuencia, los tratamientos funcionan mejor.

También hay otras empresas enfocadas más en adultos para los mismos procesos o incluso para cuando el paciente sale del hospital y necesita instrucciones para llevar a cabo en casa que le permitan mejorar. 

En cuanto al acceso de los pacientes a las soluciones de salud digital, existen  dos tipos de soluciones: 

• Las que requieren de un médico real detrás que la prescriba. Para poder acceder a estas, los pacientes dependen de que el profesional médico tenga la formación y el conocimiento sobre ellas, además de que apueste por este tipo de alternativas.  
• A las que se puede acceder sin prescripción médica. En Estados Unidos por ejemplo, muchas empresas contratan soluciones digitales para sus empleados, para que estén en mejor forma o tengan una mejor salud, enfocadas sobre todo a prevención. 

Gestión de los datos en el 3.0

Los tres vectores se están desarrollando en el contexto web 3.0. Ahora está todo más descentralizado y tenemos más propiedad sobre los datos y sobre lo que pasa con ellos. De hecho,ya vemos plataformas que ofrecen diferentes tipos de servicio alrededor de una persona. Ejemplo de ello es el Pingan Good Doctor, una plataforma china, líder en su país con un millón de usuarios al día. Significa un único punto de entrada tanto para personas sanas como enfermas. Ahí pueden solicitar sus datos médicos, acceder a sus médicos, pedir una cita, pedir los fármacos o contratar un seguro de salud, entre otras cosas, y esto facilita mucho la experiencia. 

Todavía hay mucho temor al mal uso de los datos, tanto por parte de los usuarios como del equipo médico. Seguramente en Europa habrá más barreras y resistencia a esta evolución, ya que somos más reticentes a la hora de compartir los datos y de hacer concesión de los mismos. 

En Alemania, ya hay una lista de 45 apps de salud que están prescritas y pagadas por la seguridad social. Pero solo el 4% de estás se utilizan. Falta educación en los profesionales médicos: hay muchas dudas sobre la gestión de los datos y los beneficios reales. 

Y otro temor presente es que las aseguradoras tengan acceso a nuestros datos y personalicen las cuotas en base a estos. Es decir, que una persona con predisposición genética a tener cáncer, pueda llegar a  pagar más por su póliza. A día de hoy, los datos a los que acceden las aseguradoras se tienen que anonimizar, sobre todo en Europa. De hecho, pueden tener acceso a ellos pero únicamente para hacer un análisis global y nunca individual de cada paciente. 

La salud digital todavía no es perfecta, tiene múltiples caras. La clave para absorber todo su potencial es intentar equilibrarlas.