Apps para tratar transtornos mentales ¿ayudan?

En este post revisamos la publicación de un meta-análisis cuyo objetivo era investigar si las intervenciones psicológicas para la salud mental que se administran a través de aplicaciones autónomas de teléfonos inteligentes, son eficaces para reducir los síntomas de los trastornos mentales y los pensamientos y comportamientos auto-lesivos en adultos con una mayor gravedad de los síntomas.

Los autores realizaron una búsqueda exhaustiva de literatura científica en febrero de 2018 en ensayos controlados aleatorios y analizaron los resultados. En total, dos investigadores independientes identificaron 5945 artículos, de los que 165 fueron seleccionados para una revisión detallada. Finalmente, 19 ensayos con 3681 participantes fueron incluidos en el análisis, con los siguientes temas: depresión (6), ansiedad (4), uso de sustancias (5), pensamientos y comportamientos auto-lesivos (4), trastorno de estrés post traumático (2) y problemas de sueño (2).

Los investigadores encontraron efectos significativos sobre la depresión y sobre el comportamiento frente al tabaco. No se encontraron efectos agrupados significativos para la ansiedad, la ideación suicida, las autolesiones o el consumo de alcohol. Los tamaños del efecto para los ensayos individuales variaron de g = −0.05 a 0.14 para trastorno de estrés post traumático y g = 0.72 a 0.84 para insomnio. Concluye el grupo de trabajo que aunque algunos ensayos mostraron el potencial de aplicaciones dirigidas a los síntomas de salud mental, el uso de aplicaciones autónomas de teléfonos inteligentes como intervenciones psicológicas no se puede recomendar, en función del nivel de evidencia actual.

Es interesante la discusión que presentan los autores, que señalan la diferencia con otros resultados de investigaciones más positivos, como otro meta-análisis de un año anterior. Se podrían hacer dos consideraciones al respecto. Primero, aunque resulte una obviedad, diferenciar los estudios con Apps y Webs, de los estudios con medicamentos, pues está claro que en el primer caso se están agrupando elementos heterogéneos, lo que dificulta conceptualmente la lectura de los resultados: ¿Hablamos de la eficiencia de las Apps o de esas Apps?. Segundo, y puede ser el motivo de la diferencia de resultados entre diferentes estudios, el tema de cómo se “administran” las Apps: ¿por aplicaciones “autónomas” los autores escogieron aplicaciones de los mercados sin intervención de profesionales?, ¿Solo de “auto-ayuda”?. Otros estudios se sitúan mayoritariamente en el entorno clínico (el citado meta-análisis anterior menciona que recoge “incluso” intervenciones de auto-ayuda). Y se han recogido resultados positivos en una amplia gama de programas de Internet basados ​​en la evidencia cuando Internet proporciona una capacidad "aumentada" de los servicios tradicionales. Por el contrario, se constata que la mayoría de estas intervenciones eficaces de salud no tienen sitios web para uso general.

Fecha: 08/12/2019